Joven Nazareno (Canto a San José)
Te comparto el canto, Joven Nazareno, que el Señor me permitió componer en Santiago de Chile el 27 de febrero de 2006. Es un canto dedicado a nuestro padre San José en el que descubrimos junto a su juventud muchas virtudes propias de quien vive la fe y descubre la presencia de Dios a través de lo que le rodea. Espero te guste el canto y el video que he preparado para ti.
El video lo puedes ver en: El Canal de San José
El video lo puedes ver en: El Canal de San José
www.youtube.com/oscarmj2009
O bien al final de las entradas de este diario de Actualidades Josefinas.
Joven nazareno
(18 de mayo de 2006)
Joven José, patriarca nazareno,
hombre sencillo de la Galilea,
la alegría de Dios que te rodea
regala paz en tu mirar sereno.
Tu fe hecha palabra, es escultora,
tu discurso gigante aún cuando calles.
Son tu vida, tu amor y tus detalles,
música del taller y paz sonora.
El Dios Eterno a tu amor ha confiado
Ser padre del Hijo Dios hecho carne
Esposo fiel de una Virgen y madre
una misión que jamás tú habías soñado.
Tu gesto de creyente que ama y ora
es amor que da paz, es calma y brisa
es un latido de amor fuego que atiza
una esperanza confiada hora tras hora.
Tú fuiste fuerte en las horas amargas
en lo pequeño siempre has encontrado
la caricia de Dios que va a tu lado
por eso no hay para ti angustias largas.
O bien al final de las entradas de este diario de Actualidades Josefinas.
Joven nazareno
(18 de mayo de 2006)
Joven José, patriarca nazareno,
hombre sencillo de la Galilea,
la alegría de Dios que te rodea
regala paz en tu mirar sereno.
Tu fe hecha palabra, es escultora,
tu discurso gigante aún cuando calles.
Son tu vida, tu amor y tus detalles,
música del taller y paz sonora.
El Dios Eterno a tu amor ha confiado
Ser padre del Hijo Dios hecho carne
Esposo fiel de una Virgen y madre
una misión que jamás tú habías soñado.
Tu gesto de creyente que ama y ora
es amor que da paz, es calma y brisa
es un latido de amor fuego que atiza
una esperanza confiada hora tras hora.
Tú fuiste fuerte en las horas amargas
en lo pequeño siempre has encontrado
la caricia de Dios que va a tu lado
por eso no hay para ti angustias largas.
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