Conmociona a los feligreses los daños en la parroquia de San José
Ante la mirada atónita de quienes en ese momento transitaban frente a ella, la linternilla de la cúpula cayó como consecuencia del temblor. La Basílica de Ocotlán también sufrió averías.
“Gracias a Dios no pasó a mayores”, “es una iglesia que guarda mucha historia de Tlaxcala”, “se partió a la mitad, seguro esta iglesia ya no servirá”, fueron expresiones de algunas personas que, atónitas, miraban los daños que había sufrido la parroquia de San José.
Y es que el temblor que la tarde de ayer sacudió la capital tlaxcalteca causó estragos considerables en la antigua parroquia, originalmente llamada de San Juan y San José, y que fue construida durante el siglo XVIII, en el lugar que ocupaba una antigua ermita del siglo XVI.
Los transeúntes y algunos fieles que se encontraban en el momento del temblor dentro de la parroquia caminaron entre los escombros para poder ponerse a salvo.
Personas que durante el temblor transitaban frente a ella, y algunas más que salieron de su interior, no daban crédito a lo que sus ojos veían y que, incluso, en algún momento llegaron a pensar que el templo se desmoronaría.
Y cómo no pensarlo si el movimiento telúrico de ayer ocasionó el derrumbe de la linternilla de su cúpula central que, de manera inmediata, levantó una inmensa nube de polvo que con la misma rapidez se esparció en el atrio, en el zócalo de la capital y en algunas de sus calles aledañas.
Pero el daño a la cúpula del templo que tiene un acabado al estilo palafoxiano y está adornado con motivos barrocos en argamasa (que registró también una fisura en su contorno), no fue lo único, pues la torre derecha sufrió una ligera separación de la pared de la parroquia.
Aunado a ello, la fachada tuvo fracturas de gran tamaño, desprendimientos de molduras y figuras que dejaban al descubierto el color anaranjado del ladrillo, así como la caída del pararrayos de la torre del campanario.
Además, una inspección hecha con un dron del ayuntamiento de Tlaxcala, reveló que la emblemática iglesia también presenta daños a lo largo y ancho de la bóveda de cañón (nave principal del templo).
La zona fue acordonada de manera inmediata por Protección Civil, y del lugar fueron retirados los comerciantes y las personas para evitar algún tipo de daño, en caso de que hubiera alguna replica.
Y mientras unos aprovecharon para documentar el momento que marcará a los habitantes de Tlaxcala, algunos intentaban comunicarse con sus familiares y otros más eran atendidos al estar en una crisis nerviosa.
Así, por espacio de cuatro horas, detrás del cerco de seguridad, las personas observaron el suceso.
La Basílica de Ocotlán también sufrió averías
El sismo también ocasionó estragos en la Basílica de Nuestra Señora Ocotlán, y tras un recorrido hecho por autoridades eclesiásticas, detectaron fisuras considerables en los cuatro arcos del campanario de la torre izquierda.
Aunado a ello, hubo daños en la fachada del templo, algunas de las piezas cayeron, y además, los pináculos también sufrieron averías.
En tanto, el Santuario de los Niños Mártires de Tlaxcala, Antonio Cristóbal y Juan, tuvo derrumbes de algunas piezas de ladrillo de sus altas paredes, que cayeron en su interior, sobre la lona que cubre el improvisado altar.
La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción solo presentó pequeñas fisuras en su interior, y la caída de polvo del yeso que recubre el techo del templo, así como diminutas astillas de madera.
El resto de las instalaciones del exConvento de San Francisco no sufrió percances, a diferencia de la torre del campanario en el que detectaron algunas grietas en tres de sus paredes, pero las autoridades determinarán su fueron consecuencia de ese temblor o ya existían.
Hasta la tarde de ayer, en la mayoría de las iglesias y parroquias del estado solo había daños menores, fisuras sin importancia pero, sobre todo, caída de polvo y pequeñas piezas de cal y yeso de sus techos. De hecho, los reportes señalan que en la entidad 57 templos sufrieron afectaciones, de ahí que el gobierno estatal recomendó no realizar misas hasta que las estructuras sean supervisadas.
Karla Muñetón
Miércoles 20 de septiembre de 2017
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